Todo llega y todo pasa, pero lo nuestro es pasar

Como decía el siempre lúcido Machado, todo llega y todo pasa. Y hoy llega éste, mi blog personal-personal, para que yo pueda pasar cada día por él. 

Esta semana me encontré con un buen amigo y compañero de viejas fatigas, durante las jornadas Web 2.0 organizadas por la URJC en Vicálvaro, y me dio el empujoncito que necesitaba para abrir este espacio (por cierto que si alguien se perdió las jornadas contra su voluntad, puede verlas casi integras en mi canal de YouTube).

Para ser totalmente justos debo reconocer que también el maestro fumero ha tenido algo que ver con la apertura de este nuevo blog, en el que pienso escribir al margen de los distintos roles que la vida y el trabajo te van asignando, a veces más deprisa de lo que desearíamos.