Hace pocos días coincidí con mi buen amigo y, no obstante, emprendedor, Angel Barbero. De cuando en cuando tenemos ocasión de compartir unas palabras y unas cervezas mientras intercambiamos alegrías y frustraciones asociadas a nuestra condición de pequeños empresarios-emprendedores.
Me contaba Angel en esta última ocasión como un cliente suyo, con una factura pendiente de pago desde hacía más de un año por importe superior a los 12.000 euros le había ocasionado un serio trastorno con Hacienda. En la primera liquidación trimestral tuvo que declarar el IVA correspondiente a dicha factura (más de 2.000 euros) sin poder, lógicamente, abonarlo hasta que el pago original se saldase. Tras reclamarle Hacienda dicho pago con la correspondiente providencia de apremio (20% más de penalización por el retraso), intentó embargárselo directamente en la cuenta bancaria. Ante la imposibilidad, Hacienda recurrió a una vía más expeditiva: dictó providencia de embargo de crédito dirigida a los clientes conocidos de su empresa, Gepelia, de modo que obligaba a éstos a pagar directamente al Estado todos los importes pendientes de abono a favor de Gepelia. Por supuesto, la obligación incluía al cliente original cuyo año de retraso en el pago había provocado la situación de incorriente con la agencia tributaria, sin ningún tipo de penalización hacia dicha empresa.
Mientras me horrorizaba de lo macabro de la situación, Hacienda estaba ya trazando planes similares para mí. Durante el último año he comprobado como la administración local, autonómica y estatal, salvo honrosas excepciones, ha ido dilatando sus plazos de pago, llegando a ser normal los periodos de 6, 7, 8 y hasta 9 meses de espera. Invariablemente, Hacienda reclama cada tres meses el 16% (a partir de ahora será el 18%) de todas las facturas emitidas a cualquier cliente, sea este público o privado, tenga intención de pagar o no. Aún cuando en el caso de los clientes privados puedo entender la desviación de responsabilidad, siempre me he negado a que el Estado me exija con una mano la devolución de un importe cuyo abono retiene con la otra mano.
Desde el último trimestre de 2009, los importes que me exije la pata tributaria del Estado sin que hayan sido saldados por su pata administrativa, superan ya los 15.000 euros. Como no puedo pintar el dinero me limito a contestar que liquidaré dicho IVA cuando las facturas pendientes sean saldadas. Pero el gran Leviatan no tiene tiempo que perder, máxime en un momento en el que las arcas públicas languidecen bajo los focos internacionales. Sin previa comunicación por su parte, ejerce su derecho de pernada y manda burofax a mis clientes comunicándoles que toda deuda pendiente a mi favor queda públicamente embargada por decreto y deberá liquidarse directamente en Hacienda a la mayor brevedad.
Poco importa que dichos embargos multipliquen por 7 la deuda tributaria original. Ya tendrá tiempo el pequeño empresario de hacer colas y reclamar los importes que le correspondan tras la correspondiente liquidación. Mientras tanto, esos fondos financiarán las necesidades públicas en detrimento de las privadas.
A fecha de hoy, la continuidad de mi empresa sólo se ve asegurada gracias al hecho de que la mayor parte de los clientes con pagos pendientes a mi favor son nuevos de este año 2010 y por tanto no han sido contactados por Hacienda, que se guía por el modelo 347 que anualmente registra las operaciones con terceros de cada empresa. La paradoja es que si hubiera optado por un planteamiento de mantenimiento en lugar de crecimiento acelerado durante la crisis, Hacienda estaría ahora esculpiendome un bonito epitafio. Como parece que hace con muchas pequeñas empresas: en lugar de darles un balón de oxígeno en tiempo de tribulaciones, afila sus colmillos y esquilma el territorio, emulando a los monarcas de la Europa Feudal que doblaban el diezmo en época de crisis sin importar las consecuencias para el pueblo.
Por cierto, acabo de comprobar en la homepage del organismo como han cambiado el tradicional lema ‘Hacienda somos todos‘ por el nuevo y desconcertante ‘Así mejoramos todos‘ :S
julio 3, 2010 a las 6:35 pm |
Jaime, creo que hay una «modalidad» en hacienda en la que puedes liquidar el IVA de las facturas cuando las cobras, no cuando las emites. Una colaboradora mía lo hace así, pero no sé cómo va el tema.
¿Lo has consultado?.
De todas maneras cómo mola lo que se ayuda en este país a los emprendedores, que antes de que empieces a ganar algo, hacienda ya te ha pasado la cuenta…
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julio 4, 2010 a las 3:26 pm |
Es hora de resucitarte, al igual que tu amigo se llama Angel, y son 97 días que sumados los días son 16, nº que se designa a quienes son ARAÑAS, (demonios en lenguaje biblico).
Deja de ser ciego y sordo, te devuelvo la vista y la posibilidad de oir.
Aquel que es mensajero, El enviado, el que ha de venir.
sigosinsabernada
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julio 4, 2010 a las 3:32 pm |
@juan
Si le puedes preguntar a tu colaboradora acerca de esa opción te lo agradezco. A mí lo que me han dicho es que hay un proyecto de normativa que contempla esa opcion pero que no hay fecha para su entrada en vigor. Gracias por tu apoyo constante.
@sigosinsabernada
Creo que te voy a hacer caso. Gracias!
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julio 14, 2010 a las 10:10 am |
Hola Jaime.
He hablado con mi colaboradora y resulta que ha cambiado de asesoría y le dicen ahora que no se puede hacer como te comentaba. Sin embargo anteriormente le hicieron alguna inspección de hacienda y nunca le dijeron nada al respecto.
Ha estado llamando a Hacienda y le han dicho que naranjas de la china, y está que alucina en colores (y la gracia que le ha hecho tener que liquidar el IVA como el resto de los mortales).
Voy a ver si puedo tirar de otros contactos que tengo en hacienda y me dicen algo del tema, que también me interesa personalmente.
Un saludo, y a seguir financiando al estado y a las empresas…
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julio 14, 2010 a las 10:12 am
Me acabo de dar cuenta que me salen 2 perfiles en WP… debe ser algo de desdoblamiento de personalidad, a ver si tengo un rato y lo arreglo (creo que tengo un email en Gravatar y otro en WP y se ha hecho la picha un lío…je je)
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julio 4, 2010 a las 7:53 pm |
Es perfecto, tan bien explicado, con la claridad y concisión que te caracteriza. No sabía lo del nuevo lema de hacienda; no se si es lema o epitafio. Se poco de internacional, no sé si en otros paises se sienten, como nosotros ahora, tan esquilmados por Hacienda, tan poco protegidos en nuestros derechos como contribuyentes y tan engañados con respecto a las promesas electorales. En el ‘nosotros’ me incluyo yo y muchos mas, y que se meta el que quiera!
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julio 5, 2010 a las 1:11 pm |
[…] día 97: la batalla de Hacienda [ jaimeestevez.wordpress.com ] […]
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julio 6, 2010 a las 12:45 pm |
Es terrorífico. No hay nada que me de más miedo, ahora que estoy empezando, que hacienda.
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julio 6, 2010 a las 1:13 pm |
Esto no es nada nuevo por parte de Hacienda, hace ya muchos años que lo viene practicando. En mi caso en una empresa en la que trabajé hace 10 años Hacienda reclamó a las «bravas» el IVA de unas facturas que superaban los 40 millones de las antiguas pesetas, cuando la empresa no tenía niguna intención de pagar dichas facturas. En las PYMES estos golpes por parte de la administración pueden ser mortales. En aquella ocasión provocó el posterior cierra de la empresa y más de 40 personas en el paro.
Si Hacienda no es capaz de flexibilizar los cobros en casos como estos muy dificilmente lograremos crear un verdadero tejido empresarial capaz de sacarnos a todos de la crisis. Es una visión a corto plazo por parte de las «autoridades» prefieren cobrar a las bravas, llenar sus arcas hoy, aun obligando a esas empresas a cerrar y dejando de cobrar impuestos futuros, eso por no hablar del lastre de los parados que producen esos cierres, que van directos de vuelta al Estado en paro y ayudas… vamos, a todas luces un negocio redondo para ambas partes… un pierde/pìerde clarisimo.
Creo, si no me equivoco, que el IVA no tienes que pagarlo si declaras la factura como incobrable, pero no se que tipo de condiciones tienes q cumplir para poder hacerlo.
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julio 9, 2010 a las 6:36 pm |
…tienes más razón que un santo.
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julio 14, 2010 a las 11:11 am |
[…] os puedo asegurar que Hacienda lo consigue con suculentos recargos e intereses de demora, sin olvidar los embargos que nos pueden hacer en cualquier […]
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julio 15, 2010 a las 1:29 pm |
Hola Jaime.
Siento que te hayas visto arrastrado a trabajar mucho para las AA PP, es algo de lo que se debe huir como de la peste, pero casi imposible en España, dado el trozo enorme de PIB que copan y lo perverso del proceso.
Si lo piensas bien, te cobran unos impuestos brutales, se lo gastan en montañas de tonterías improductivas que para más escarnio ponen palos en las ruedas de los ciudadanos, con lo que queda o lo que habrá te contratan, no te pagan y te reclaman por adelantado parte de lo que ya les diste o les darás para seguir con sus tonterías.
Sí, esta respuesta no habla de economía, habla de política.
Por cierto, no me va ni bien ni mal, tirando que no es poco, pero sigo sin hacer biografías ;-).
Un saludo.
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julio 23, 2010 a las 12:49 am |
[…] lo que deberías conocer y no muchos lo cuentan es este artículo muy recomendado en lectura de Jaime Estevez sobre la batalla de Hacienda, pero esto es únicamente una reflexión inicial, a lo que voy, una […]
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agosto 7, 2010 a las 12:27 am |
[…] Autor:https://jaimeestevez.wordpress.com/2010/07/03/dia-97-la-batalla-de-hacienda/ […]
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agosto 31, 2010 a las 12:01 pm |
Hola, voy a tener que discrepar de tus protestas a hacienda, el IVA es un impuesto que se produce cuando facturas, y lo normal debe ser que cobres cuando facturas.
Hacienda no puede esperar a que te paguen la factura, porque el beneficio ya lo tienes, aunque sea en modo de deuda, que tus activos no sean líquidos no quiere decir que no tengas que pagar. Si no hubiese que pagar por beneficios que no fuesen líquidos habría un filón para evitar impuestos si los pagos te los hacen en especie.
Una cosa que no comentas es que ese IVA que te exige hacienda por otro lado ha sido descontado en la declaración de IVA de tu cliente, por lo que si no te lo exige el estado en vez de recaudar está perdiendo dinero.
Lo que me parece curioso es que factures a clientes que según dices no tienen intención de pagar.
El tema del impago de las administraciones es algo que yo criticaría, y propondría una legislación muy dura contra la administración en este sentido, pero aunque veamos al estado como algo monolítico no lo es, un ayuntamiento y haciendo no son las mismas «personas», ni son culpables uno de lo que haga el otro, y menos puedes culpar a hacienda si el ayuntamiento no te paga.
Con respecto a los impagos en muchos casos para retener el pago del IVA hacienda te obliga a exigir por vía judicial el pago de la factura, y curiosamente cuando se propone esta solución el empresario huye porque quiere «quedar bien con su cliente» pero ese IVA que se le está hacienda exigiendo lo tiene y lo ha recibido tu cliente en su declaración de IVA.
Me parece digno de análisis que haya gente que diga que su empresa ha tenido que cerrar por no pagar este tipo de IVA, no es lógico, si facturas a un cliente miles de euros se supone que no son todo beneficios, sino que has incurrido en una cantidad de gastos mucho mayor que el importe del IVA, sino cobras esa factura el perjuicio principal es lo que te ha costado prestar ese servicio, no un 18% de IVA. Si es mayor problema el IVA 18% que los gastos en los que has incurrido es que tu empresa es muy muy rentable, pero tienes un problema grave de liquidez.
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octubre 16, 2010 a las 6:35 pm |
A este blog le falta una actualizacionnnn
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octubre 18, 2010 a las 12:46 am |
[…] para la formación del perfecto objetor fiscal (XX) Rehenes: “Aún cuando en el caso de los clientes privados puedo entender la desviación de […]
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noviembre 11, 2010 a las 7:20 pm |
Seguros automotor
Cotizar tu seguro nunca fue tan fácil. Seguros contra incendio, seguro médico, seguros de vida, seguros robo y asistencia para el viajero.
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enero 2, 2011 a las 2:47 am |
[…] jaime estévez 100 días en la vida de un emprendedor « día 97: la batalla de Hacienda […]
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enero 4, 2011 a las 1:47 pm |
«Así mejoramos todos»… no conocía el nuevo lema de Hacienda. Pero qué le pregunten a todas las pymes y autónomos que se han ido al garete si han mejorado…
La verdad es que cuando tu negocio, ese en el que has puesto tanta ilusión y esfuerzos por crear y mantener, empieza a peligrar, debe ser frustrante que, en este caso Hacienda, te busque a ti las cosquillas en vez de echarte un cable, y que los que te han generado la deuda «se vayan de rositas».
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enero 15, 2011 a las 10:09 am |
Así es amigo, Hacienda aplica la Ley del embudo, lo ancho para ellos y lo estrecho para el contribuyente.
Te llevo siguiendo un tiempo desde Twitter @joaquinpuerta, hoy hemos iniciado @haciendavigila, creo que te puede resulta útil. También en facebook «Hacienda te vigila».
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abril 19, 2013 a las 6:19 pm |
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abril 19, 2013 a las 6:28 pm |
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